Malenkov, el opositor al armamento nuclear

Uno de los casos mas, llamémosle, curiosos de la Historia de la URSS fue el de Georgi Malenkov que llegó a ser Primer Secretario del PCUS y Presidente del Consejo de Ministros durante los años 1953 a 1955.

Aliado de Stalin, Kagánovich y Beria en las purgas, cayó en desgracia en 1957 cuando ya solo era miembro del Politburó para acabar sus días como desterrado en una empresa hidroeléctrica de Kazajstán muy lejos de su tierra natal de Oremburg en los Urales.

¿Como consiguió sobrevivir? ¿Cuales fueron las causas de su desgracia?

Pues la primera pregunta es una incógnita pues acusado de pertenecer al Grupo Antipartido con Bulganin, Molotov y Kagánovich, grupo creado con la intención de quitar el poder a Kruchev y nunca aclarado que fuera real, y cuando ya Beria había sido fusilado, su única pena fue el destierro como director de la empresa citada.

La segunda pregunta tiene alguna posible respuesta aparentemente. En una época de intrigas por el poder cualquier motivo cierto o falso podía ser suficiente para caer en desgracia y en su caso fueron el fracaso de su política económica al tratar de convertir la industria pesada en productora de bienes de consumo y , sobre todo, en su oposición tajante al armamento nuclear. Decía que el armamento nuclear podía acabar con el mundo y que puesto que nadie podía garantizar su control lo mejor era no tenerlo. Este argumento podía haber cambiado el devenir de la Guerra Fría porque solo un bloque tendría este terrorífico medio y hubiera impuesto su hegemonía mientras que al tenerlo los dos el miedo guardó la viña evitando quizás una tercera guerra mundial.

En cuanto a su fracasado intento de producir bienes de consumo hubiera evitado el colapso económico posterior de la URSS pero eso ya lo sabéis de tantos y tantos ríos de tinta como se han escrito sobre ello sobre todo por los que yo llamo profetas del pasado....

Malenkov murió en la cama en 1988, muerte que para los tiempos que le tocaron vivir se puede considerar toda una hazaña.

Está visto que los visionarios no tienen cabida en este mundo porque nadie le escuchó y aun a día de hoy todos hemos olvidado a este ¿buen señor? cuyos argumentos pudieron cambiar el mundo.Hoy en vez de en el PCUS  se habría afiliado a los Verdes.