sábado, 4 de agosto de 2012

Bielorrusia :el peluche como arma de destrucción masiva

Una agencia de publicidad sueca, Studio Total, subcontratada por una organización de Derechos Humanos desconocida para mi, contrata una avioneta en Suecia y lanza un montón de peluches "armados" con un cartelito hecho a mano pidiendo respeto a los valores democráticos en Bielorrusia en donde gobierna Aleksander Lukashenko con mano dura hasta considerarle en algunos sectores sobre todo periodísticos como el último dictador de Europa aunque yo creo que hay algunos mas.
¿Consecuencias? El Gobierno bielorruso expulsa al Embajador sueco Steffan Ericsson, el Gobierno sueco no admite las credenciales del recién nombrado Embajador de Minsk en Estocolmo, Lukashenko cesa a Rachkovski jefe de la División de Fronteras y a Pakmelkin jefe de la Defensa Aérea y advierte a todos los mandos de la unidades implicadas en preservar el espacio aéreo bielorruso de que esta será la primera y la última vez y lanza el aviso de que cualquier otra violación de la seguridad nacional será contestada con el derribo inmediato de cualquier aparato y aun queda por ver si tomará alguna medida con Lituania a través de cuyo espacio llegaron los peluches a su país.
¡¡¡Buff que miedo¡¡¡¡
La noticia en si parece sacada de un capítulo de los Simpsom pero es real como la vida misma lo cual me hace pensar en que el mundo anda desquiciado, tanto como para convertir unos peluches en un problema diplomático primero y de seguridad nacional después, como cuando el aleman Mathías Rush aterrizó en plena Guerra Fría en la Plaza Roja de Moscú, y hasta me parece ridículo que andemos buscando, y construyendo,  armas de destrucción masiva, que por cierto no se lo que son, cuando unos  peluches son capaces de crear este cataclismo:¿No sería mejor fabricar peluches y lanzarlos sobre el enemigo masivamente? Podrían estar vestidos de camuflaje para aparentar ser mas fieros e incluso los carteles con las consignas podrían hacerse en ordenador o en imprenta y a varios colores...

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