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sábado, 9 de febrero de 2013

Rusia como país moderno y el verbo "Berlusconizar"

Ya he hablado varias veces sobre que es Rusia, que siente, como se siente o como la veo yo y me parece necesario hacer un pequeño repaso a la vista de los comentarios que se me hacen en la entrada anterior.
Rusia por sus dimensiones e Historia se puede considerar un Imperio, aunque Parag Khanna difiera, y como tal Imperio también los rusos creen en su gran destino y se sienten imperiales y yo pienso como ellos solo que con reparos.
Los imperios garantizan la cohesión y el orden pero son muy reacios a los cambios, en el caso ruso muy justificado porque los cambios siempre han significado a peor, porque sus estructuras también son imperiales y por tanto con un engranaje administrativo lento cuando no oxidado en el que intervienen demasiados factores que ralentizan cualquier decisión, decisión que siempre se rige por los principios de Maquiavelo, es decir, la razón de Estado por encima de todo lo que clasifica según las nuevas teorías a este país como moderno, justo en medio de los premodernos y los postmodernos....
Por tanto cualquier cambio, incluso aquellos cargados de las mejores intenciones como puede ser el actual plan contra la corrupción o los que pretender reducir el consumo de alcohol y tabaco, pueden tener una duración, incluida su puesta en marcha, que va más allá de lo razonable.
Quiero decir con esto que si las medidas en este terreno de Putin son un lavado de imagen o una realidad necesaria, que debiera serlo, solo el tiempo, largo tiempo, lo dirá entre aquellas cosas anteriores y los resultados que si son siempre lentos, en este caso más por lo expuesto anteriormente.
¿España con la que quieren compara la situación mis anónimos amigos? Pues yo creo que ni lo intenta, o no lo hacen o lo hacen tan mal que lo parece...
¿Que puede suceder? En situaciones tan dificiles y tan esperpénticas como la nuestra en la que a veces recordamos a un estado fallido suele pasar que aparecen iluminados en cuyas filas se alistan los que no tiene nada que perder porque nada les hemos dado, los desencantados y aquella clase media perdida que siempre fue la base de cualquier revolución industrial, social, económica...¿Ejemplos? Pues en nuestra amada Hispanoamérica hay actualmente bastantes, retrocediendo en la Historia hablaríamos de los fascismos o del comunismo y en lo más reciente la "berlusconización" de Italia que roza la tragicomedia incluidos tribunales para juzgar las presuntas hazañas amorosas del Cavalieri. Y no hablo de cosas peores de las que ya estamos afortunadamente vacunados sino de aquellas cosas que se puede producir cuando nada funciona.
Y en esta "berlusconización" es en la que puede caer un país como el nuestro cuyos vestigios imperiales vivieron su último capítulo cuando el Greco pintó a su caballero de la mano en el pecho que en realidad estaba tapando un descosido de su jubón, berlusconización que ha llevado al país alpino a una situación económica peor aun que la nuestra que ya es decir y a la que puede volver porque en las encuestas hay un repunte importante en el voto a favor del dueño del Milan F.C.
Comparar la situación social rusa con la nuestra es imposible ahora y siempre porque ellos son un imperio hoy y nosotros hace siglos que dejamos de serlo y porque allí parece que lo intentan y nosotros lo estamos dejando para más adelante....hasta que aparezca ese líder que nos saque de la apatía aunque los resultados sean catastróficos.

1 comentario:

  1. Siento, amigo enamorado de Rusia, y, por lo que parece de sus políticos, no estar de acuerdo con casi nada de lo que expone. El texto que le copio a continuación se ha publicado no hace mucho y significa llanamente que el señor putin "protege" a los ricos que se niegan a pagar impuestos en su país. No me parece una conducta ejemplar, que se dice ahora.
    Rusia será un gran imperio, y lo fue y probablemente el futuro del mundo esté en sus manos. Pero, ¿a qué precio? al que siempre pagaron los millones de ciudadanos rusos que por mor de los zares primero, del comunismo después y de las mafias que todo lo controlan ahora, viven en la más absoluta de las miserias. Un profesor, por ejemplo, en Moscú vive en la miseria, las chicas jóvenes, preparadas huyen para dedicarse a la prostitución en cualquier país. Y ahora el señor Putín, que sólo Dios sabe las riquezas que acumula, va a dictar ahora leyes para evitar el alcoholismo, y la corrupción... Miedo dan esas cosas. En España, donde tan mal estamos, vivimos infinitamente mejor que el pueblo ruso, para su desgracia. usted ha vivido en Rusia, y dice conocerla bien, ¿No ha visto su miseria, o se hospeda usted en hoteles de lujo? Conozco personas venidas de Rusia y le aseguro que la miseria de la que huyen es grande. No me ponga, por favor, se lo ruego, al gobierno de Putin como ejemplo de nada. Otra cosa es que el pueblo ruso sea grande, por lo que lleva sufrido, porque en pleno siglo XXI viven como viven. Y ya sé, son los turistas que visitan España que más gastan, pero también sus mafias se están instalando en el sur de España.
    No hablemos más de nuestra patria porque unos cuantos -demasiados- políticos sean corruptos. Y quienes nos revelamos, quienes los denunciamos públicamente, no somos insumisos, ni antisistema, ni nada parecido, somos ciudadanos honrados que reclamamos justicia social, para todos, no sólo para unos pocos. Que, casualmente, son los que más se quejan porque pierden sus privilegios.
    Y siento no pensar como usted, sería más cómodo

    "El actor francés Gerard Depardieu ha recibido su pasaporte ruso tras reunirse con el presidente Vladimir Putin, ha reconocido Dmitry Peskov, portavoz del dirigente.
    Este "breve encuentro" entre el intérprete y el político ha tenido lugar en la residencia del presidente en Sochi, a orillas del Mar Negro. Las imágenes difundidas por la televisión rusa muestran a los dos abrazándose durante una reunión en la ciudad balneario que acogerá los Juegos Olímpicos de 2014.
    Días atrás Putin firmó un decreto para conceder la ciudadanía rusa a Depardieu, quien recientemente amenazó con renunciar a su pasaporte francés como forma de protesta por la decisión del Gobierno galo de aumentar al 75% los impuestos sobre la renta de los más ricos.
    Putin ya le había prácticamente garantizado el mes pasado en rueda de prensa la concesión de la ciudadanía rusa."

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